23 SEPTIEMBRE, 2019
Las 7 herramientas básicas de calidad son conocidas así por ser un conjunto fijo de técnicas gráficas identificadas como las más útiles en la solución de problemas relacionados con la calidad.
Se llaman básicas porque son adecuadas para personas con poca formación en la materia de estadística. También pueden ser utilizadas para resolver la gran mayoría de las cuestiones relacionadas con calidad en cualquier área de la industria.
Estas herramientas fueron recopiladas y divulgadas en Japón por Kaoru Ishikawa, profesor de ingeniería en la Universidad de Tokio y experto en el control de calidad, quien estableció las siete herramientas básicas (seis estadísticas y un diagrama de causa-efecto, de análisis).
Posteriormente se extendieron a todo el mundo con el nombre de “herramientas básicas para la mejora de la calidad” o también, “las 7 herramientas básicas de Ishikawa” y varias denominaciones similares.
La explicación proviene de la historia japonesa que nos dice que los samurái, es decir los guerreros japoneses, utilizaban siete herramientas o armas en su actividad militar.
Es la representación gráfica y sencilla a modo de mapa mental en forma de pescado, donde se ve rápidamente y de forma clara cuáles son las causas posibles de un efecto o problema y clasifica las ideas en categorías útiles.
En la cabeza de la espina de pescado se coloca la descripción del problema como punto de partida para trazar el origen del problema hacia su causa raíz. El mecanismo para encontrar la (s) causa (s) raíz consiste en considerar el problema y preguntarse “por qué” hasta que se llegue a identificar la causa raíz o hasta que se hayan agotado las opciones razonables en cada diagrama de espina de pescado.
Ayuda en la identificación de la ruta más adecuada que el producto o servicio recorrerá en el proceso, es decir, muestra las etapas secuenciales del proceso, utilizando símbolos que representan los diferentes tipos de operaciones.
Esta herramienta sirve para reunir datos y clasificarlos según determinadas categorías, mediante la anotación y registro de sus frecuencias bajo la forma de datos. Son especialmente útiles a la hora de recoger datos de los atributos mientras se realizan inspecciones para identificar defectos. Por ejemplo, los datos sobre frecuencias o consecuencias de defectos recogidos en las hojas de verificación se representan a menudo utilizando diagramas de Pareto.
Es un diagrama de barras verticales con una forma muy particular, que se utiliza para identificar las pocas fuentes clave responsables de la mayor parte de los efectos de los problemas.
Es una herramienta que facilita la toma de decisiones en función de la prioridad de los problemas o las causas que los generan. Según Vilfredo Pareto, “el 80% de los problemas se pueden solucionar, si se eliminan el 20% de las causas que los originan”.
Son una forma especial de diagrama de barras y se utilizan para describir la tendencia central, dispersión y forma de una distribución estadística. A diferencia del diagrama de control, el histograma no tiene en cuenta la influencia del tiempo en la variación existente en la distribución.
Tiene como objetivo mostrar la distribución de frecuencias de datos obtenidos por mediciones periódicas, creando así un panorama de los patrones que más se repitieron en un determinado período de tiempo
Utilizado para mostrar las tendencias de los puntos de observación en un período de tiempo. Es un tipo de gráfico utilizado para el seguimiento del proceso, determinando el rango de tolerancia limitado por la línea superior (límite superior de control) y una línea inferior (límite inferior de control) y una línea media del proceso (límite central), que fueron estadísticamente determinadas.
Esta herramienta gráfica nos permite analizar si hay algún tipo de relación entre 2 variables. Calculando el coeficiente de correlación se puede ver el grado de relación entre ambas y si es negativo, positivo o nulo.
Las herramientas básicas de calidad son un apoyo en la recopilación y el análisis de datos para tomar decisiones con base a ellos y así resolver la mayoría de los problemas en las áreas productivas, considerando que el producto o servicio brindado al cliente sea el más económico, útil para el fin propuesto y cumpla con la satisfacción del cliente.