La ósmosis inversa es un método de filtración y tratamiento de agua que surgió a finales de la década de 1950, que se ha mantenido como uno de los procesos de purificación de agua muy eficaz. Este proceso consiste en utilizar una membrana semipermeable que remueve diversos minerales, iones y las partículas de mayor tamaño en el agua potable. Por esta razón, en este artículo te explicaremos qué es el agua de rechazo en los sistemas de ósmosis inversa.
¿En qué consiste el agua de rechazo y cómo afecta a los sistemas purificación de agua?
En todos los sistemas de ósmosis inversa existe el agua de rechazo, también conocida como aguas residuales, este líquido es el que sale de las tubería y que va directamente al desagüe. El proceso continúa cuando pasa por el decantador y el filtro de carbón, entonces el agua del grifo irá a parar a la membrana de ósmosis inversa, que filtra una determinada cantidad de agua. Mientras que envía el restante al sistema de aguas residuales junto con las sales disueltas que queremos eliminar. El resultado de este proceso es agua limpia sin cloro, pero tiene una EC (electro-conductividad) entre 15 a 20% más alta que el agua del grifo.
En otras palabras, el agua de rechazo es el líquido restante que puede existir después de proceso de ósmosis inversa. Este proceso le quita diversos minerales al agua mediante la utilización de membranas para disminuir las sales presentes en su composición. Su eficiencia en la reducción de estos elementos puede llegar a ser de entre el 90 al 95%, dependiendo de la tecnología y dispositivos que se utilicen en el proceso.
Importancia de recuperar el agua de rechazo en las industrias
Como en casi todos los aspectos de la vida, el agua es un elemento esencial en cada uno de los ámbitos de la actividad industrial y tiene importantes impactos económicos y ambientales en cualquier empresa, compañía o industria. Para reducir este impacto, es necesario considerar el reciclaje del agua de rechazo para poder ahorrar dinero y reducir el impacto ambiental de estas actividades económicas.
Aunque el contenido de sal en las aguas de rechazo es mayor que en el agua del grifo. También es necesario recordar que cuenta con proceso de desmineralización eficaz, lo que nos permite usar este tipo de agua para diversos fines industriales. Algunos ejemplos que podemos dar para aprovechar de mejor manera las aguas de rechazo son las siguientes actividades:
- Es un excelente líquido para limpiar los cuartos de cultivo y cuartos de maduración.
- Brinda limpieza eficaz para bandejas donde se coloca todo tipo de instrumentos.
- Nos permite limpiar macetas o todo tipo de herramientas.
- Además de poder utilizarla para fregar el suelo o los fregaderos en nuestros hogares.
- También se utiliza para regar céspedes, árboles frutales o plantas y flores que no requieran agua sin sal.
- Además, el agua de rechazo es una excelente opción para llenar una piscina.
Agua de rechazo en los sistemas de ósmosis inversa, una solución ideal
En conclusión, el agua tratada por un proceso de ósmosis inversa puede ser una gran solución a los diversos problemas que existen en el suministro de agua. Actualmente, este sistema es uno de los principales sistemas para proveer agua a las zonas industriales en nuestro país, ya que estas plantas o fábricas, llegan a encontrarse en puntos alejados de las ciudades, lo que dificulta el suministro de este elemento. El método de ósmosis inversa es una buena manera de brindar este tipo de servicio a las personas que trabajan en este tipo de lugares y que permiten que no falte este líquido tan importante para el ser humano.
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